El Consejo de la Juventud de Nicaragua, fundado desde 1992, cuyo reconocimiento explícito en la Ley 392 “Ley de Promoción al Desarrollo Integral de la Juventud Nicaragüense” en conmemoración de la semana de la juventud contemplada del 08 al 12 de agosto, saluda a los y las jóvenes nicaragüenses instándoles a que hagamos de esta fecha no solo un día para regocijarnos de nuestra condición sino para asumirnos como tal en esa meta histórica trascendental de transformación estructural que estamos llamados a hacer en pro de la construcción de una sociedad más responsable, incluyente, justa e igualitaria.
Consideramos de gran importancia, promover en el Año Internacional de la Juventud, sobre la base del diálogo y el entendimiento la campaña bajo el lema “SOY JOVEN, SOY PAZ” con el objetivo de contribuir a la construcción de una cultura de paz, inclusiva y equitativa, a través de la promoción y educación en valores, el fortalecimiento de las organizaciones de juventud en la prevención de la violencia.
Es nuestra oportunidad para que desde nuestra profunda convicción de jóvenes comprometidos con las causas del sector, nos movilicemos de manera organizada, cívica, consiente y responsable en función de la demanda de nuestros derechos, en el cumplimiento de nuestros deberes y en el posicionamiento de la ciudadanía juvenil a todos los niveles, demandando la inclusión de nuestras agendas en los planes y programas que desde el ámbito municipal, regional y nacional se proponen.
Aprovechamos este espacio para hacer el llamado a los y las jóvenes del país a actuar en pleno respeto, tolerancia y aceptación de las diferencias, demostrando que nosotros somos capaces de establecer nuevas formas de hacer política, sin caer en la ofensa, la descalificación, la violencia y desacreditación de quienes no comparten nuestras ideas.
Instamos a las autoridades municipales, regionales y nacionales, instituciones educativas, religiosas, económicas, gremiales, sociales, a los medios de comunicación a unificar esfuerzos encaminados a erradicar los factores que promuevan violencia de todo tipo, y aportar de esta forma a mejorar la convivencia armoniosa de todas y todos los nicaragüenses.
Los y las jóvenes no somos el futuro del país, somos presente, y como tal debemos actuar plenamente en la gestión y decisión que sobre los Planes de Desarrollo y las Políticas Publicas se lleven a cabo, no es con apatía, con autoexclusión que vamos a transformar las barreras del adultísimo, es solo con una conciencia generacional comprometida con el cambio social que alcanzaremos la construcción de una sociedad justa y digna para todos y todas.
Como siempre la Juventud construyendo el presente…
Aportando al Futuro…
